Todo el que ha pasado por una mudanza, sabe que es uno de los momentos más estresantes en la vida de cualquiera. Aquí ofrecemos unos consejos básicos para organizar una mudanza con el mínimo agobio posible.

Antes de la mudanza

1. Consigue suficientes cajas: vas a necesitar más de las que te puedes imaginar. Puedes comprar cajas plegables en tiendas de bricolaje o adquirirlas desde los supermercados u otro tipo de tienda. Si has contratado a una empresa de mudanzas, pregúntales si prestan cajas. Guarda de 10 a 15 cajas vacías para artículos de último momento y que ocupen mucho espacio (ropa de cama de la noche anterior de la mudanza, comida de la nevera, utenselios de limpieza etc.
2. Realiza una lista con todo lo que tienes que hacer para tu mudanza, desde adquirir cajas, etiquetas, cinta etc. hasta cuándo empezar a empaquetar

3. Aprovecha para la mudanza todas las bolsas, maletas y mochilas que encuentres por casa y llénalas con artículos más personales: artículos de baño, juguetes de los niños, ropa de cama y cosas que vas a necesitar a partir del primer día en tu nuevo hogar.

   

   Durante la mudanza

4. Utiliza elementos diferenciadores como pegatinas de colores para saber qué tienes en cada caja, y de esta forma facilitar a los trabajadores de la empresa de mudanzas saber dónde colocar cada caja en la nueva casa. Por ejemplo, pegatinas amarillas en las cajas que lleven artículos de cocina, azul cuarto de baño, rosa dormitorio, verde salón…
5. Empieza a guardar artículos en cajas lo antes posible. Si realizas la mudanza en invierno, guarda ropa y accesorios de verano semanas antes de la mudanza, guarda también libros, juguetes, cds artículos de cocina etc.
6. Colocar un mueble pesado en primer lugar. Comenzará a cargar las cajas después de que todos los muebles grandes, voluminosos y pesados ​​ya estén asegurados en el camión. Las cajas más livianas se pueden colocar en la parte superior de los muebles. Después de rellenar los espacios alrededor de sus muebles, crear un muro de cajas frente a los mismos.
7. Si tienes que limpiar la casa después de vaciarla, intenta adelantar durante los días previos a la mudanza, así ahorrarás tiempo. Limpia el interior de armarios y cajones antes del día de la mudanza.
8. Presta especial atención a los artículos de valor y procura hacer hueco en el coche para que puedan viajar contigo. Esto no solo incluye joyas, sino papeles importantes, pasaportes, recibos, agendas personales, listas de teléfono etc.

Después de la mudanza

Lo que realmente necesitas una vez finalizada la mudanza de tu nuevo piso es que el baño esté en uso, igual que la cocina, la cama y tus cosas más básicas para vivir. El resto puede llegar después si no puedes hacerlo todo de una vez. Si contratas a una empresa de mudanzas probablemente trasladarán todo en uno o dos días. En este caso asegúrate de que todo está en orden antes de pagar el último recibo.

Si la mudanza la haces con alguna persona de confianza que te eche una mano con su coche o furgoneta, asegúrate de poder transitar correctamente por la calle en la que se ubique tu nuevo hogar, por ejemplo si es una calle peatonal, una zona residencial… deberás obtener distintos permisos.

Y en cuanto al montaje de los muebles, tendrás que llamar a algún manitas para que todo salga lo mejor posible y puedas empezar a disfrutar de tu nueva vida.